domingo, 13 de abril de 2014
Nada me gusta mas que tú
La mente ya no ayuda. El corazón ya no da señales de vida.
Tú ya no te encuentras enrollado entre mis sabanas.
Sólo se encuentra entre ellas el olor de tu perfume; es tu única huella.
Me siento vacia y sin animos de seguir respirando.
Las sonrisas ya no se forman en mi boca si no eres tú quien las provoca.
Es que todo esto es por tí. Es que eres tú, jodidamente tú.
Enrollada en la cama me hayo. Fingiendo que aún sigues aquí.
Pero la puerta hace rato que se cerró.
El recuerdo del sabor de tus labios me provocan terremotos corporales.
Ojalá todas esas sensaciones duraran eternamente.
Algunos me llaman loca, porque sólo hablo de tí.
¿Pero sabes qué? Que me encanta que me digan eso.
domingo, 23 de marzo de 2014
Una historia indiferente para tí, una de tantas.
Annie y Luke se vieron obligados en mantener esa conversación
incómoda aunque ninguno de los dos quisieran. Ambos estaban cansados y con
dolor de cabeza causado por los litros de alcohol ingeridos. Aquellos dos
amigos habían disfrutado de una larga noche de laseres, música y diversión
acompañada de alcohol y drogas. Sus atuendos lo decían todo; maquillaje
desarraigado, crop top blanco, falda corta con lentejuelas
color flúor rosa y pies doloridos de los malditos tacones para Annie. Y pelo
desaliñado, camiseta de tirantes y Pepe
Jeans con olor a sudor para
Luke. Para desgracia de Annie –la cual veía venir comentarios sobre lo sucedido aquella
noche– la
pandilla que hace pocos minutos los acompañaban en el restaurante se fueron con
excusas demás.
Las manos de Ann acariciaban la taza
blanca donde contenía su té de menta que hacía que augmentara su energía
agotadas por aquella noche. Su atención estaba fijada en el reflejo del líquido
verde. Y mientras, la cabeza de Luke estaba maquinando alguna frase contundente
e ingeniosa a la vez que sugerente para Ann, pero sin llevarla al reproche.
Aunque Luke no lo supiera era brillante soltando frases sin pensar.
– Seré claro. Lo de anoche...
– Lo de anoche no significó nada,
Luke. –Intervino la
morena con rapidez. Luke no se dió cuenta de cuan daño le hacían esas palabras
a Ann, que no levantaba su mirada. Si no, se vería reflejada su vergüenza y
timidez en el iris del chico rubio.
– Estaba un poco bebido.
– Todos lo estabamos. No te preocupes.
Aunque para el resto de la humanidad no se
hubiera creído lo que salía de la boca de Ann eran las palabras menos
contundentes que alguien ha podido escuchar, Luke sí se las creyó.
Los rayos de sol anunciaban por los
cristales del bar-restaurante que ya había amanecido, junto al redondo relog
blanco colgado a un lado de la pared que las agujas apuntaban a que eran las
7:30 de una mañana de Junio. Annie cambiño su mirada para fijarla en aquel
reloj, pensando en alguna frase para seguir con una descariada y poca exitosa
conversación.
– ¿Estas segura de que estas
bien? –Quería
asegurarse el chico.
– Sí –Le sonrió Ann.
La aguja segundera taladraba su sonido a
Ann.
–Quiero dejar claras las cosas, Ann. Lo de
anoche no fue nada. Tú y yo somos amigos. Pertenecemos a la misma pandilla y no
quiero que todo esto estropee nuestra relación, y menos que influya de malas
maneras.
Por mas que Ann no quisiera admitirlo, le
dolían esas palabras mas de lo que ella misma podía pensar hasta que de la boca
de Luke salieron. Estaba jodida. Estaba realmente jodida y pasaría ser una
mierda en los próximos veinte minutos que sería aproximadamente lo que tardaría
en llegar a casa para tumbarse en la cama y llorar como si no hubiera mañana.
Pero cada beso, cada caricia que podía
recordar la hacían tener un dulce recuerdo con sabor a Vodka y Coca Cola. Sólo
hacía cuatro horas que se habían besado en medio del gentío bailando al son de la música electrónica y
luces neón acariciando sus pieles que estaban atentas de cada movimiento, al
menos la de Ann.
Annie en ése momento se sintió la chica
mas poderosa de todo el pueblo (Luke era un chico muy solicitado).
–Mira, escucha –Dijo cansada Ann, que quería acabar con esto
que no Luke que quería poner cada punto sobre las íes- lo de anoche no fue mas
que cosa de las pastillitas que John nos dio, no te preocupes.
Ann cogió sus dos tacones y rápidamente
salió del restaurante descalza y a paso ligero. Luke se quedó con la mirada
impasible observando la puerta balancearse por donde Anne se había ido. El
chico de pelo alborotado y iris dilatado sentía un pequeño pinchazo de
culpabilidad en las costillas.
sábado, 22 de marzo de 2014
Soul's rebelion
And here we are... two lost souls making the best of both. Our kisses make our love strong, powerful. But everytime we kiss we are breaking inside, we are destroying ourselves just because we are ambitious. We are hungry of love, of hugs, of kisses, of little bites on the lip.
Oh, I love when you do that.
In every kiss, in every little weird sound your voice make, every petting, every touch you make my hair more spiked. And now all have logic, now our love make sense. People say it is sex, but it's not just sex. It's making love. It's playing, touching, feeling deeping inside. And what matters what people says!? It's just a game for two crazy lovers that anybody can't underestand.
And then, the two souls exploted and came alive and leave from the inside of our bodies to the outside crossing larynx, trhoat and mouth to the love atmosphere. And that two souls met each other like you and me are doing. The perfect thing just happened. But that's not the end. The end it's enough good as making love. Both in the bed snuggling and sharing no more that two or three words plenty of happiness atmosphere.
miércoles, 19 de marzo de 2014
Al menos sobreviví
Las marcas de la muñeca
te recuerdan constantemente
que sobreviviste al pasado
para contarlo en el presente.
Todo esta en tu mente
y aunque te reviente
no puedes cubrirlas
Eres débil, eres sólo un adolescente.
Las revistas, los programas
embotan tu cabeza
eres sensible, todo te molesta
Y aun así no protestas.
Todo te hace mal
las palabras te hacen daño
sólo haces que llorar
éso es tu único acompaño.
La deuda de lagrimas te mata,
no puedes asumirlas
pero sin embargo,
sigues cantando.
Cuentas que estas feliz
le sonríes a la vida
Una sonrisa amarga,
nunca he visto mejor una actriz.
Estas hasta el cuello,
estas cansada,
no puedo mas con ello
Explotas, agotada.
sábado, 22 de febrero de 2014
Cuando deje de quererte
No sé cómo me enamoré, ni cuando te conocí... mi memoria me emborrona nuestros recuerdos. Lo que mi mente sí sabe perfectamente es que nunca dejaré de quererte, hasta que pierda la conciencia y no sepa diferenciar el color de tu pupila y el calor de tu sonrisa. Dejaré de quererte cuando las vacas vuelen. Dejaré de quererte cuando mi última lagrima caiga de mi barbilla y se desprenda en el suelo. Dejaré de quererte cuando compartir risas deje de ser diario. Dejaré de quererte cuando ya no me sorprendas con cada una de tus sonrisas. Dejaré de quererte cuando te vea con otro hombre de la mano y no seas feliz a su lado. Dejaré de quererte cuando no tenga historias que contarte. Dejaré de quererte cuando tus arrugas dejen de parecerme bonitas. Dejaré de quererte cuando las arrugas tengan sentido cuando hacemos el amor. Dejaré de quererte cuando no me acuerde de ti. Dejaré de quererte cuando mis latidos dejen de retumbar en las paredes de mi corazón y no tenga suficiente fuerza para seguir luchando. Dejaré de quererte cuando nuestras manos se separen porque una de ellas deje de tener vida.
Dejaré de quererte, dejaré de quererte.
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